Subvirtiendo la Historia de las Brujas

Halloween ha llegado y con esta festividad: las brujas. Seres aterradores que lo mismo se comen a un niño que acaban con la cosecha de una familia o seducen a un hombre y lo llevan por el mal camino. Brujas con verrugas en la nariz, encorvadas, viejas: durante siglos esa fue la imagen que teníamos de ellas, pero ¿de dónde salieron? Hoy en U-Storage queremos aplicar un poquito de revisionismo histórico y subvertir la historia de las brujas, ¿listas?, ¿listos?

Historia de las brujas

Historia de las brujas

Un poco ya todos lo sabemos: la historia la escriben los vencedores, es así de simple, dependiendo de quién cuente la historia, es que habrá villanos y héroes.

Así, la historia de las brujas, durante muchos, muchos siglos, la contaron quienes las quemaron y sólo hasta hace poco es cuando se ha comenzado a revisar la historia de las brujas y sus cacerías como una historia de mujeres perseguidas por ser mujeres, una historia de lucha entre dos mundos: el antiguo y el moderno.

Y es que nuevas formas de estudiar la historia, nuevos ojos que leen viejos documentos, han podido trazar una línea directa entre la creación de la figura satanizada de la bruja con la aparición del feudalismo y más tarde el capitalismo, una línea que se ha arraigado de tal manera en la humanidad que aún hoy en día cuando queremos ofender a una mujer le decimos “bruja”, se utilizan símiles a ellas como “la loca de los gatos” para hablar de una mujer sola e independiente.

Para muestra de lo que acabamos de decir, pensemos en algunas brujas de nuestra infancia: Hermelinda Linda (que en el nombre llevaba la ironía), las brujas de Hocus Pocus, Doña Clotilde “la Bruja del 71” en El Chavo el 8, la Bruja de Blancanieves…

Brujas de películas

Hoy, pese a que algunos historiadores (sobre todo aquellos que defienden las viejas corrientes) se muestran cautelosos, se ha reconocido que al grito de “brujería”, decenas de miles de mujeres fueron perseguidas y muchas veces, asesinadas. 

Así, durante mucho tiempo ser bruja significaba algo negativo, pero, a pesar de muchos, las feministas de los años 70 anunciaron: ¡temblad, vuelven las brujas! Y con esta consigna bajo el brazo, la figura de las brujas emergía para ser revisitada, re-pensada, re-valorada.

Aparecieron brujas como Sabrina, Hermione, las hermanas de Charmed y Practical Magic, la Bruja Escarlata, las Brujas de Eastwick…

Hoy en U-Storage queremos contar la historia de las brujas, desde su perspectiva, ¿se animan a conocerlas? Después de todo, no hay mejor fecha que Halloween: echemos un vistazo  al caldero y conozcamos realmente a las brujas.

 

El fin del mundo mágico

Desde que la humanidad ha existido y conforme ha ido evolucionando, las distintas cosmovisiones que ha ido estructurando han hablado de un mundo terrenal y un mundo mágico, el mundo de los dioses, de los espíritus, de los muertos….

Brujas de la Edad Media

Durante siglos la unión entre ambos mundos era fuerte, la conexión del ser humano con el entorno era regida por estas cosmovisiones y saberes que se iban pasando de generación en generación, y en muchas culturas, el conocimiento, contrario a lo que nos dijeron alguna vez, lo mantenían las mujeres, en especial ese que derivaba de la cercanía con las plantas y el cuerpo.

Todo empezo a cambiar con los grandes imperios, ahí, el conocimiento se vuelve poder y es el hombre quien lo acumula para sí mismo, en Roma comienza a legislarse contra los magos y la magia, práctica que tomó mucha más fuerza durante la Edad Media cuando la Iglesia Católica organizó una campaña formal contra todas los vestigios de conocimiento pagano, incluyendo prácticas curanderas y de adivinación, todo eso pasó a ser visto como superstición y señalado como herejía.

 

De la represión al mito

Se tiene registro de que los primeros juicios contra la brujería datan del siglo XIII en el norte de Italia, fue justamente a finales de este siglo cuando la Iglesia arremete con fuerza contra los crímenes herejes y funda La Inquisición como el brazo encargado de acabar con ellos y claro, la Iglesia no estaba sola: las autoridades seculares participaron voluntariamente en la persecución y represión de todo ese mundo.

Juicios de las brujas

La brujería pasó a implicar un pacto directo con el diablo y los demonios, y el castigo para quienes la practicaran era la hoguera, pues era tal su amenaza a la sociedad cristiana que sólo en la muerte podría acabar. Los juicios se hicieron más frecuentes en Europa y se multiplicaron; entre los siglos XIII y XVIII se estima que el número de juicios por brujería osciló entre 100.000 y 120.000 personas, con un resultado de entre 30.000 y 50.000 ejecuciones.

Entre 1550 y 1650, entre el 80 y el 85% de las acusadas eran mujeres y, contrariamente a la creencia común, no se trataba exclusivamente de mujeres marginadas, ancianas, solteras o viudas, sino que comparecían ante los tribunales mujeres de todas las categorías sociales.

Nadie era inmune a las acusaciones de brujería, a menudo derivadas de denuncias que podían surgir de rumores o tensiones que consideraban que las mujeres tenían más probabilidades de sucumbir al diablo que los hombres, pues, claro, eran más débiles que ellos.

 

El fin de la cacería de brujas

Varios acontecimientos marcaron el fin de los juicios e iniciaron la despenalización de la brujería, siendo el edicto del Parlamento de París de 1682 y la Ley de Brujería de 1736, de los más importantes. Fue entonces que el fenómeno se convirtió en objeto de estudio y fascinación.

Surgió un nuevo enfoque hacia la brujería, uno que se centraba en sus elementos folclóricos; las brujas comenzaron a ser vistas como mitos, seres que realmente no existían. Algunos autores, como los hermanos Grimm, buscaron demostrar las conexiones entre la brujería y las antiguas creencias paganas y así, sus obras contribuyeron a la difusión de la figura de la bruja en la cultura dominante.

Brujas de Halloween

La bruja de Halloween (con cara de anciana, nariz verrugosa y encorvada sobre su caldero) se creó y su arraigo en la sociedad fue tan poderoso que hoy es una de las imágenes más perdurables de la cultura pop occidental.

Pero, tal vez, esa imagen no es del todo acertada, ¿cierto? Tal vez es el momento de comenzar a pensar a las brujas de manera distinta, cómo hacerlo…

 

Tres libros y un podcast para que sigas re-conociendo a las brujas

Libros

  1. Jules Michelet – La Bruja: un estudio de las supersticiones en la Edad Media.
  2. Silvia Federeci – Caliban y la bruja: mujeres, cuerpo y acumulación originaria.
  3. Mona Chollet – Brujas: ¿estigma o la fuerza invencible de las mujeres?
     

Podcast

Reivindicando a las brujas

“Somos las nietas de las brujas que quemaste”

Consigna feminista que nos permite ver cómo es que la historia puede ser retomada y reinterpretada. Hoy, el feminismo ha reivindicado a la figura de la bruja, de la loca de los gatos, de la mujer curandera y cuidadora, la rebelde, la que busca participar del mundo público, a la que busca que sus acciones y voz contribuyan a su entorno.

Brujas y feminismo

Al proponer la rehabilitación del término “bruja” mediante la deconstrucción de los estereotipos negativos asociados a él, el movimiento feminista lo reinterpretó como símbolo de la resistencia femenina. Mujeres que durante siglos fueron vistas como desechables o ni siquiera fueron vistas, alzaron su voz: las viudas, las mujeres solteras, las mujeres sin hijos, las viejas, las parteras, todas han encontrado en la figura de la bruja a una aliada.

No sólo esto, examinar la historia de las brujas también ha permitido reinterpretar la historia del capitalismo, la historia de la humanidad, pues existe un curioso vínculo entre la acumulación primitiva y los juicios de las brujas, entre el paso del mundo feudal al mundo industrializado.

En los últimos años, la cultura Wicca se ha ido extendiendo entre nuevas y viejas generaciones, entre mujeres pero también entre hombres, entre aquellos que buscan un aprendizaje distinto al que tuvieron y que no les brinda lo que necesitan pues está construido en una visión de mundo que aniquila al que es distinto y la verdad es que todos somos distintos así que visiones más diversas de mundos siempre nos ayudarán a vivir mejor pues nos permiten aprender a respetar y cuidar del que es diferente a nosotros.

Cultura Wicca

Las brujas son figuras desafiantes pues se enfrentan al poder: lo hicieron cuando violaron las leyes feudales, lo hacen hoy cuando se rebelan ante el patriarcado o el capitalismo que se come al planeta entero sin control, así que tal vez es momento de que todos nosotros tratemos de verlas con otros ojos, los ojos del respeto al distinto, los ojos del que quiere aprender algo nuevo.

Y para ligar el Día de Brujas con nuestras propias tradiciones, dale clic al Día de Muertos, la fiesta de los mexicanos.