Si hay una cosa que tienen en común los automovilistas, peatones y ciclistas de CDMX es que les gusta ponerse en el camino de los demás. Todos los días, en la ciudad nos cuesta desplazarnos y pareciera que estamos en una misión de estorbar o poner en riesgo al otro. Así que he aquí, el Manual de Etiqueta para moverse en CDMX de U-Storage.
De acuerdo al Censo Nacional de Vivienda 2020, en la CDMX, dos de cada 10 hogares tiene bici, 46.8% tiene automóvil o camioneta. El INEGI ha informado que hay 44.9 millones de vehículos, 2 millones 100 mil bicis y se calcula que diariamente hay 10 millones de viajes peatonales.
Así que cuando uno atraviesa la ciudad, se sumerge en un movimiento constante que, desafortunadamente, se convierte en un verdadero via crucis que todos padecemos.
No nos dejaran mentir, cada vez que uno sale de su casa y se mueve por la ciudad es testigo y/o protagonista de algún percance en las calles. De sólo pensar en circular en esta ciudad, uno se estresa.
No hay duda, en términos de tráfico y movilidad CDMX es un peligro y tristemente, los responsables somos todos. No sabemos andar en la ciudad civilmente, muchas veces olvidamos la etiqueta mínima y otras de plano pecamos y cometemos actos imprudentes, groseros y hasta peligrosos con tal de llegar del punto A al punto B.
Ya sea por omisión, ignorancia o ensimismamiento, hay actos muy básicos que podemos poner en acción y que con toda seguridad, pueden contribuir a que el diario paso por la ciudad se vuelva más amigable.
A continuación, el Manual de Etiqueta para moverse en CDMX de U-Storage.
Etiqueta de peatones
Los peatones son los actores con mayor prioridad al momento de moverse en las calles de la ciudad pero eso no implica que no deban observar ciertas reglas al momento de desplazarse.
La primera, es que un peatón debe de dar preferencia a otros peatones, incluyendo a las personas que utilizan algún tipo de asistencia para su movilidad y a los vehículos de emergencia.
Siempre que un peatón vaya a cruzar una calle debe de voltear a ambos lados y buscar hacer contacto visual con los conductores.
En vías primarias y secundarias (aquellas con más de dos carriles) se debe cruzar por las esquinas, en el caso de vías con menos de dos carriles se vale cruzarse en cualquier punto siempre y cuando uno se cuide de no hacerlo cuando un vehículo circule, esto incluye bicicletas y otros vehículos no motorizados.
Se debe transitar por banquetas y pasos peatonales, nunca por el arroyo vehícular y nunca se debe cruzar cuando los vehículos se muevan y entre ellos cuando estén detenidos.
Cuando uno espera a cruzar la calle debe hacerlo parado sobre la banqueta, nunca fuera de ella o invadiendo los carriles bici, en estos espacios los peatones no deben caminar y siempre que crucen una calle que cuente con uno deberán de estar atentos a él.
Etiqueta de ciclistas
Segundos en la lista de prioridad de tránsito en la ciudad, los ciclistas deben de ser muy cuidadosos al momento de desplazarse, el riesgo que corren es bastante elevado y suele suceder que por desconocimiento o descuido, cuando andamos en bici solemos cometer varios actos que dificultan nuestro paso por la ciudad.
Primero que nada, el ciclista siempre debe de circular en el mismo sentido de los autos, o en su defecto del sentido que el carril lo dicta, nada de andar de salmoncito a contracorriente de los demás vehículos, es un acto realmente peligroso y poco considerado con los demás.
Siempre se tiene que rebasar por la izquierda, a todos: autos, motos, bicis, camiones.
Al momento de cruzar una intersección en una vía secundaria con semáforo en rojo se vale cruzarse, eso si, siempre y cuando antes se disminuya la velocidad, se verifique que no existen peatones u otros vehículos cruzando en verde, en este caso, como ciclistas debemos parar totalmente, nada de querer ganarle a nadie.
El ciclista siempre deberá de circular en sus vías exclusivas, en caso de que deba circular en carriles con vehículos motorizados tiene derecho a ocupar el carril completo de la derecha y podrá girar y rebasar por la izquierda siempre y cuando lo señale y no se interponga con otro vehículo.
Si vamos a cambiar de carril, se debe señalizar con el brazo o la mano.
Prohibido circular por banquetas y áreas para peatones, carriles centrales o interiores de acceso controlado así como en carriles del transporte público, salvo que éstos cuenten con esa opción indicada.
Procurar guardar una distancia mínima de 1.50 metros hacia todos lados con respecto a los vehículos motorizados.
Por cierto, si quieres aprender más sobre las reglas para ser un ciclista urbano, checa aquí.
Etiqueta de automovilista
La responsabilidad de un conductor no es una broma y ésta comienza con que siempre deberá de dar prioridad a peatones, ciclistas, vehículos de emergencia.
Respetar las señales de tránsito y las prioridades de paso es una obligación que solemos olvidar cuando nos movemos por la ciudad y no debe de ocurrir.
Conducir con prudencia, nunca bajo el efecto de bebidas alcohólicas u otras sustancias que alteren nuestra capacidad de respuesta y reflejos.
Ojo todos: cuando un ciclista va por una calle que no tiene vía exclusiva, tiene todo el derecho a ocupar el carril completo y uno como automovilista no tiene derecho de presionarlo, en todo caso se deberá rebasar por la izquierda si se puede. Otra cosa acerca de la relación auto-bici: se debe procurar una distancia de metro y medio.
No se deben obstruir áreas de paso peatonal, del transporte público y carriles-bici.
La doble fila es un verdadero problema en esta ciudad, está prohibido y sancionado pero al parecer no nos importa cuando estamos tras el volante, combatamos esa actitud y limpiemos nuestras calles de ese comportamiento.
Por seguridad, siempre usar cinturón de seguridad y en caso de las motos, casco.
En cruces sin semáforo la etiqueta siempre dicta uno a uno. En luz roja, no hay vuelta continua, es alto total y el amarillo no es sinónimo de acelérale.
Moverse en la ciudad no tendría que ser tan complicado y tan riesgoso, además, como pocas cosas en la vida, está en nuestras manos contribuir y poner un granito de arena para solucionarlo.
Se trata un poco de que cuando salgamos de casa volteemos a ver el mundo que nos rodea, seamos atentos con todo aquel con el que nos crucemos y nos conduzcamos de forma segura y amable.
Luego de haber hablado de la pesadilla de moverse en la ciudad, se nos antoja pensar en aspectos padres de CDMX y aprovechando que hoy es así 14 de febrero te dejamos 5 barrios perfectos para el romance.